Dar los primeros pasos como arquitecto o arquitecto técnico no solo implica saber proyectar, calcular o dirigir una obra. En la actualidad, también supone saber comunicar quién eres, qué haces y cómo trabajas. Y en ese terreno, las redes sociales se han convertido en una herramienta clave para construir una presencia profesional sólida desde el inicio de tu carrera.
No se trata de “hacerse influencer”, sino de desarrollar una marca profesional coherente que ayude a generar oportunidades, contactos y visibilidad.
Algunas de las reflexiones que aparecen en este artículo se apoyan en las aportaciones de Andrés Espadas, Social Media Strategist, y Ander Echevarría, director técnico de Biopasiva 100x100, quienes participaron en este networking de CONECTA by hna en el que se abordó la importancia de la marca personal, la comunicación profesional y el uso estratégico de las redes sociales en las primeras etapas de la carrera profesional.
- Si no estás en redes, para muchos no existes
Hoy en día, estar presente en redes sociales es casi imprescindible para existir profesionalmente. Como señalaba Ander Echevarría, director técnico de Biopasiva 100x100, “una empresa debe crear sus perfiles en las redes sociales porque al final es un gran escaparate, es la única forma que tienes de llegar a los clientes y que vean el trabajo que realizas. Hoy día, si no estás presente en las redes sociales, realmente no existes”.
Este mensaje es igualmente válido para los profesionales jóvenes: estudios, empresas y posibles colaboradores consultan perfiles activos y coherentes, incluso antes de una primera reunión.
- Piensa las redes como tu primer portfolio vivo
Antes de hablar de plataformas o formatos, lo más importante es el enfoque. Las redes son una extensión directa de la marca personal profesional. Como nos comentaba Andrés Espadas, “la marca personal al final es lo que dicen de ti cuando no estás presente, por lo tanto, realmente es la forma en la que comunicamos, transmitimos y sobre todo cómo aportamos esta imagen, con la que queremos que se nos identifique de una manera positiva y real”.
No es necesario haber diseñado o construido grandes obras para empezar. Los proyectos académicos, los procesos, los detalles constructivos o la forma de resolver problemas técnicos ya hablan de cómo trabaja un profesional.
- Define a quién te diriges antes de empezar a publicar
Improvisar suele ser uno de los errores más habituales. Antes de lanzarte a publicar, conviene reflexionar sobre a qué público quieres dirigirte y qué tipo de perfil profesional deseas construir. Ander Echevarría insiste en que “lo primero es que un profesional o empresa sepa a qué público se dirige, dónde se quiere enfocar, qué perfil va buscando, que haga un poquito de búsqueda, una investigación de lo que hay en el mercado y qué es lo que se está demandando”.
Tener claro el enfoque ayuda a construir una comunicación más eficaz y alineada con los objetivos profesionales.
- Traduce tu conocimiento técnico en contenido que aporte valor
Las redes sociales permiten transformar el conocimiento técnico en contenido que permanece en el tiempo. Andrés Espadas señala que “las redes sociales pueden ser uno de los canales más efectivos para alcanzar una imagen de marca personal positiva porque nos permiten traducir lo que pensamos en imágenes y, sobre todo, en textos que se quedan reflejados en el tiempo”.
Este tipo de contenido permite transmitir valores y aportar conocimiento, cubriendo las necesidades de la audiencia desde el punto de vista visual, auditivo e informativo. Explicar bien una decisión técnica o un detalle constructivo puede ser mucho más relevante que publicar una imagen llamativa sin contexto.
- Construye comunidad, no solo seguidores
Las tendencias actuales apuntan a la creación de comunidades más pequeñas y especializadas. Construir comunidad implica interactuar, participar en conversaciones técnicas y aportar valor de forma constante. Muchas oportunidades profesionales surgen precisamente de estas interacciones, más que del número de seguidores.
- El vídeo corto ya no es opcional
El vídeo corto se ha consolidado como uno de los formatos más efectivos para ganar visibilidad. Informes recientes como el Social Media Trends Report 2026 de Hootsuite o Pinterest Predicts 2026 confirman que los vídeos breves en plataformas como Instagram, TikTok o YouTube Shorts son clave para captar atención y posicionarse.
En arquitectura y arquitectura técnica funcionan especialmente bien los contenidos que muestran procesos de obra, antes y después, explicaciones de soluciones técnicas, visitas comentadas o errores comunes y aprendizajes. No es necesaria una edición compleja: la claridad, la utilidad y la autenticidad pesan más que la perfección.
- Usa la IA como aliada, no como sustituta
La inteligencia artificial se ha incorporado de forma natural al uso de las redes sociales. Herramientas de IA generativa permiten ahorrar tiempo a la hora de redactar textos, generar ideas o adaptar un mismo contenido a distintos formatos. Sin embargo, la IA debe entenderse como una aliada, no como un sustituto del criterio profesional. El valor diferencial sigue estando en la experiencia real, el razonamiento técnico y la capacidad de tomar decisiones.
- Menos hashtags y más palabras clave: piensa en la búsqueda social
Cada vez más personas utilizan redes como Instagram o TikTok como si fueran un buscador. Esta tendencia, conocida como búsqueda social, hace que ya no baste con añadir muchos hashtags al final de una publicación. Hoy es más importante explicar bien qué haces y qué estás mostrando.
Utiliza palabras claras y reconocibles en los textos: “dirección de ejecución”, “control de obra”, “detalles constructivos”, “rehabilitación”, entre otras. Describe el contenido del post como si alguien lo fuera a buscar, explicando el contexto y el valor técnico del trabajo. Esto facilita que tu contenido llegue a las personas realmente interesadas y refuerza tu posicionamiento profesional.
- LinkedIn no es aburrido (si sabes usarlo)
Para jóvenes arquitectos y arquitectos técnicos, LinkedIn sigue siendo una plataforma clave para construir visibilidad profesional. No es necesario escribir textos largos ni excesivamente formales. Funciona especialmente bien compartir proyectos académicos explicando qué has aprendido, contar tu primera experiencia en obra, reflexionar sobre un error y lo que te enseñó o hablar de una herramienta que estás empezando a utilizar.
Hablar en primera persona y con honestidad genera cercanía y credibilidad. Mostrar tu proceso de aprendizaje y tu evolución profesional puede resultar mucho más interesante que intentar proyectar una imagen de experiencia que todavía se está construyendo.
- Atrévete a empezar, aunque no sea perfecto
Para quienes están dando sus primeros pasos, el mejor consejo es atreverse a empezar sin esperar a hacerlo perfecto. Andrés Espadas lanzaba un mensaje claro a los perfiles jóvenes: “lo primero es que cometas errores, que los cometas rápido y que te atrevas a lanzarte, porque nadie nace sabiendo y en un mundo tan cambiante, cuantas más pruebas realices, más aprendes y más creces”.