Futuro Arquitecto Técnico

¡Enhorabuena! Has terminado la carrera de Arquitectura Técnica y es el momento de comenzar tu vida profesional. Te contamos los primeros pasos que debes seguir, sea cual sea la manera en la que quieras ejercer profesionalmente (abrir tu propio estudio, trabajar contratado en una empresa, en el sector público, etc.).



En la escuela donde te has graduado

1. Solicita tu título académico.
2. Si quieres seguir estudiando, consulta la oferta formativa de las Escuelas, instituciones educativas, etc.
3. Si deseas seguir vinculado al mundo universitario, únete a las asociaciones de exalumnos y podrás seguir informándote de todas las novedades académicas.


En el Colegio Oficial de la Arquitectura Técnica

La colegiación es un requisito legal para el ejercicio de la profesión de Arquitectura. Acércate a tu Colegio Oficial de Arquitectos con el título académico y allí te indicarán los pasos a seguir.


Tu mutualidad

Premaat es la mutualidad que gestiona la previsión social del colectivo de profesionales de la Arquitectura Técnica. Nacimos en 1944 para proteger a los aparejadores y sus familias. En 2020 nos unimos a hna, fundada también aquel año por los arquitectos. Además de un amplio catálogo de productos de previsión social complementaria, ahorro y salud, ofrecemos el Sistema de Previsión Personalizado (SPP), alternativa legal al RETA para el ejercicio por cuenta propia de la profesión de Arquitecto Técnico.

trabajar como arquitecto


¿Por qué debes saber qué es la previsión social antes de empezar a ejercer?

Ejercer por cuenta propia como arquitecto autónomo conlleva la obligación de cotizar a un sistema de previsión, es decir, cotizar para la futura jubilación. Los arquitectos tienen la posibilidad de cotizar a un sistema privado y alternativo a la Seguridad Social. De este modo, como profesional de la Arquitectura puedes optar entre cotizar a través de la Seguridad Social (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos - RETA) o con hna, a través del Sistema de Previsión Personalizado (SPP), que ofrece de manera más flexible y siempre que supere, al menos, el 80% de la cuota mínima que correspondería abonar en el RETA, todas las coberturas necesarias y exigidas, así como asesoramiento personal. Para aquellos que trabajan por cuenta ajena, el SPP supone el complemento perfecto a la pensión pública, creando un fondo personal, flexible e intransferible para la jubilación, con una alta rentabilidad y ahorro fiscal.